viernes, 29 de junio de 2018


No sé decir
pero el grito incordioso que me ahoga
quiere salirse de algún modo

Dame una de tus manos
y te la voy a morder hasta saciarme
Dame uno de tus dientes y lo voy a guardar bajo la almohada
como amuleto o como souvenir

Este impulso caníbal que me altera
o me conforma
Se instala en mí
o es lucha contra mí
es compás o palabra, no sé

imagen:
en el recuerdo de la infancia hay una flor
desconocida en tanto que innombrada
nunca sabré su tallo y su capullo,
la raíz
pero el perfume está impregnado en mi retina
con el primer aprendizaje de la muerte

esa flor es todos los posibles
esa muerte es la única que cuenta


2 comentarios:

Jorge Curinao dijo...

Qué hermoso poder acompañar este día ventoso con tus poemas. Qué lindo es leerte.

Carolina dijo...

Muchas gracias!

The entire history of us

creo que esta vez perdí   pero siempre voy a tener tus ojos volteándose para mirar mi pelo largo y suelto como si por primera vez me vieras